El flujo de caja tiene un gran impacto en la sostenibilidad. Eche un vistazo a lo que sucedió a principios de la década de 2000 con las punto com, y nuevamente a finales de la década de 2000 y esta década actual. Las empresas con pocos activos líquidos no pudieron superar el obstáculo de un mercado en contracción. Lo que sucedió con las puntocom también afectó al sector financiero, y ninguno de los dos estaba preparado. Dada la importancia del flujo de caja, tiene sentido asumir un papel activo en la gestión de activos y el mantenimiento de registros. La administración interna abre la puerta a una serie de problemas de seguridad, mientras que la separación de áreas de responsabilidad mejora la rendición de cuentas en todos los niveles.
Las tuercas y tornillos de la responsabilidad
Algunas de las estrategias más básicas para mejorar la rendición de cuentas comienzan por asegurarse de que el departamento que recibe efectivo no sea el departamento que registra las transacciones y concilia las cuentas. Por ejemplo, si los recursos humanos manejan la nómina, no deberían realizar un seguimiento de las horas. Si tienen ambos trabajos, pueden emitir cheques por horas no trabajadas. Con el tiempo, incluso las pequeñas adiciones pueden suponer una pérdida considerable. Cuando el mismo departamento también es responsable de realizar auditorías, no existe una responsabilidad real.
Traer ayuda de terceros
Los servicios de contabilidad subcontratados pueden aportar responsabilidad a las operaciones financieras de una empresa. Si la empresa gestiona los ingresos y los gastos internamente, el servicio de contabilidad subcontratado puede registrar las transacciones. Luego, durante el proceso de conciliación, el servicio de contabilidad puede detectar errores. Debido a que el contable nunca tiene acceso directo a las cuentas, no tiene forma de desviar fondos. Los departamentos internos saben que existe una supervisión externa, lo que ayuda a que los empleados internos sean honestos.
Además de la rendición de cuentas, también existe la oportunidad de administrar mejor el flujo de caja. Las cuentas por cobrar generalmente representan del 40 al 50 por ciento de los activos de una empresa. Las cuentas vencidas representan una pérdida significativa de ingresos y pueden causar problemas de flujo de efectivo. El cobro de esas cuentas puede ser un desafío para una empresa centrada en generar nuevos dólares, por lo que tiene sentido subcontratar los servicios de facturación y cobranza.
Más allá de un tenedor de libros
Además de los servicios de contabilidad, los servicios de controlador subcontratados pueden aportar un nuevo nivel de gestión financiera a la contabilidad de la empresa. Desde la elaboración de informes personalizados y la prestación de orientación y conocimientos, la subcontratación de los servicios de contabilidad y control puede respaldar el crecimiento del negocio de la empresa desde la etapa inicial hasta el establecimiento establecido. Y dado que el proveedor de servicios es una empresa de servicios completos, puede escalar junto con la empresa. Con la combinación correcta de servicios financieros subcontratados, una empresa disfruta de los beneficios de una mayor supervisión, eficiencia y sostenibilidad.